Análisis: Hidden on the Trail of the Ancients - terror en la Patagonia

Inexplorados bosques milenarios. Un grupo de expedicionarios en busca de una antigua leyenda. Pero no todo sale como lo planeado, y pronto descubrirán que el lugar encierra un horrible secreto jamás revelado. Hidden es una aventura point n' click, con foco en historia, exploración y puzzles.

Calificación:


Desarrollador:  Lost Spell
Distribuidora:  Lost Spell
Lanzamiento:  5 de agosto de 2015
Plataforma: PC

Análisis basado en una copia digital del juego para Steam, facilitada por el equipo de Lost Spell.

Lo que más me apasiona de las aventuras gráficas, mi género preferido, es el hecho de investigar, pensar, detenerse y descubrir cómo resolver una situación particular para poder avanzar en el juego. Esa sensación de poder ir recolectando objetos que en un principio parecen inútiles para más tarde entender que en realidad los necesitábamos, quizás luego de dos horas de juego sin saber para qué nos iban a servir. En este contexto de exploración, aunque con otra estructura y dinámica, se encontraban los juegos que se denominaron “aventuras gráficas en primera persona” (Aventuras Point & Click, para otros), siendo el Myst (1993) y el Riven (1997), su secuela, exponentes por excelencia. De la misma forma, tampoco podemos olvidarnos del querido The 7th Guest (1993) y su secuela llamada The 11th Hour (1995), ambos mucho más focalizados en el género del terror clásico.

De esta forma, y muy similar a los juegos que mencionamos últimos, nos llega desde nuestras tierras argentinas el videojuego llamado Hidden: On the Trail of the Ancients, desarrollado por la empresa Lost Spell Studio. El juego, que se encasilla como una “aventura gráfica en primera persona”, fue una sorpresa, una grata sorpresa para todos los que lo veníamos esperando. Sabemos que el género del terror es algo que vende, y luego del éxito de la saga Doorways, de los también argentinos Saibot Studios, las expectativas con el lanzamiento de este exponente eran altas. Y no decepcionaron a nadie.


Con una historia pensada para dos partes, Hidden: On the Trail of the Ancients es la primera entrega, secundada por Hidden: The Untold, que está siendo terminada. El juego es una mágica referencia a la literatura de Lovecraft, por sobre todas las cosas, y quienes estén acostumbrados a la narrativa de dicho autor, se van a sentir en el limbo. La trama, los distintos elementos que le dan vida a todos los puzzles del juego, las locaciones, todo tiene una inspiración tan fuerte del escritor de Providence que al menos a mí, muy personalmente, me fue imposible despegar los ojos de la pantalla. No solo por su historia, narrada por el personaje a quien controlamos así como también por libros, escritos y notas que vamos a ir encontrando por el camino, sino también por su gameplay, que resulta ser atrapante, complicado, intrincado, pensado en detalle para complicar nuestras retorcidas mentes de exploradores de lo misterioso e intangible.

Y así es como la gente de Lost Spell Studio logra jugar con nuestro sistema nervioso: la dificultad, por momento, se convierte en la protagonista indiscutida.



Recuerdo de chico, cuando no existía internet y nos juntábamos con mis amigos a contarnos cómo resolvimos tal o cual enigma en algún juego. Construíamos nuestras propias guías, teníamos un cuaderno especial con las anotaciones de cada juego. Incluso nos llamábamos por teléfono si no podíamos pasar una situación en particular. Eso sí, teníamos una regla: para pedir ayuda, teníamos que haber estado una hora como mínimo intentando superar ese problema. Y con Hidden volví un poco a esas épocas. Me encontré escribiendo en unos papeles que tenía sobre mi escritorio algunos datos que sabía que me iban a servir. Me encontré dando vueltas una y otra vez por las mismas habitaciones sin saber qué hacer. Incluso por momentos me desesperé por no encontrar un camino lógico para continuar con el juego. Y sí, también me encontré, luego de más de una hora, preguntándole a una gran amiga si había podido superar algunas de las partes donde yo me había quedado sin aire para seguir.


Y es que, como decíamos antes, por momentos la dificultad es TAN elevada, que resolver algunos puzzles se convierte en parte del azar mismo, lejos de ser algo que uno entienda, incluso habiendo leído con detenimiento cada uno de los escritos con los que nos cruzamos. Y así como el cuidado de los detalles es una parte fundamental en este juego, la atención a los detalles que nosotros debemos poner debe ser milimétrica. Hay muchísimas situaciones que requieren de un barrido con el mouse centímetro por centímetro, inspeccionando cada rincón, cada sombra, cada cúmulo oscuro. Debemos, como dije, inspeccionar incluso en la oscuridad, en lugares donde aparenta no haber nada. Incluso en lugares donde ya estuvimos investigando: seguramente algo se nos perdió entre tanto detalle.

Y si seguimos hablando de detalles, no podemos dejar de mencionar el aspecto gráfico. Y acá hay que remarcar algo muy importante, sobre todo en este tipo de juegos que muchos pueden denominar “indie”: no se abusa del recurso de repetir assets por todos lados. Es difícil que uno vea algún elemento de decoración repetido. Todo tiene su trabajo minucioso, sus texturas trabajadas, sus detalles. Cada locación está recreada de forma impecable, con una arquitectura completamente real y convincente, respetando muchos matices temporales de la época en la que el juego está situado. El desparramo de creatividad e imaginación que hay en todos los elementos que componen visualmente al juego es digno de destacar.


Y de la misma forma, ya hablamos de la narrativa, que resulta ser en mi humilde opinión lo mejor de todo y lo que más fuerza genera para no dejar que en ningún momento el juego se vuelva aburrido o nos permita despegar los ojos de lo que está sucediendo. Pero acompañando esto, vamos a poder escuchar un trabajo también impecable en ciertos momentos donde el personaje habla, o se leen ciertos escritos. El trabajo de voces, la nitidez del audio, y la expresividad que le brinda al juego es algo notorio.

La suma de todos estos aspectos mencionados anteriormente hacen que el Hidden: On the Trail of the Ancients sea un producto que nada le tiene que envidiar a nadie.

Y lo mejor de todo es que no lo vamos a terminar enseguida, ya que el juego propone más de ocho horas promedio para poder llegar al final de este primer episodio. Sí: OCHO HORAS. Y en los tiempos que corren, este número es algo realmente increíble, algo por lo que todos los amantes de este género seguramente estarán más que contentos.



Palabras finales No puedo dejar de decir que al menos para mí, con mi mirada old school sobre una industria moderna, con esas ansias de que la narrativa esté por sobre todas las cosas, arraigada por un gameplay atrapante y firme, este juego es un exponente que nadie debería perderse, no solo por ser un producto nacional sino porque la apuesta de ir más allá la superan con creces. A pesar de su elevada dificultad, la inmersión que logra con los climas que genera, la música aplicada a la perfección, la cantidad inmensa de puzzles, la increíble historia, y el eficaz cuidado de todos los detalles, hacen de este uno de los mejores juegos que pude probar en lo que va del año.


Lo Bueno:
- Historia atrapante.
- Mucho contenido y buena duración.
- Banda sonora a la altura.

Lo Malo:
Puzzles ilógicos y azarosos.
- Mucho pixel hunting.

Nota Final:

8.5

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ESCRITO POR Lucas Robledo

Game Designer y Producer. Redactor mercenario. Cinefilo conflictivo. Casi músico y muy poco de ilustrador. Gamer de la vieja escuela. Aficionado al terror, a los comics y a la literatura.

1 Gritos :

  1. Excelente el juego, se tomaron un gran trabajo y es muy satisfactorio jugarlo.
    Los graficos son increibles para una producción local y la historia toma un rumbo muy interesante.
    El inventario también me fascinó y entablar conversación con uno de los personajes.
    Ojalá el segundo vuelva a superar expectativas.

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