Impresiones: Jugamos la prometedora beta de Call of Duty: Modern Warfare III

Call of Duty: Modern Warfare III tendrá su acceso anticipado y su beta abierta durante dos fines de semana. Los jugadores de PlayStation ya pudimos jugar durante el fin de semana del 6 de octubre; las demás plataformas deberán esperar hasta el 12 de octubre. Te contamos en detalle sobre nuestra experiencia de juego con la beta de Call of Duty: Modern Warfare III.

Cocinar se convirtió hace no mucho en una de mis pasiones, algo que hago completamente por hobby y sin ningún fin más que el de cocinarle a quienes amo. Lo que tiene la cocina de lindo es que te permite creatividad, pero también tiene una forma muy rigurosa de castigarte: si te pasaste con algún condimento, probablemente le arruinaste la comida a todos. Por eso, muchas veces encuentro una proporción perfecta de todos los ingredientes y de ahí no la modifico nunca más. No me juego por agregarle algo nuevo, y mucho menos, sumarle o restarle la cantidad de los ya existentes. 


Activision parece sentirse igual que yo en la cocina, porque parece haber encontrado la proporción perfecta de contenido y ya no se anima a modificarla en lo más mínimo. Siendo de las más longevas sagas de FPS, y presentando una plataforma competitiva online desde hace décadas, Call of Duty viene a hacer bien lo que ya hacía bien, y a hacer mal lo que ya hacía mal.

En primera instancia, la beta de Call of Duty: Modern Warfare III posee demasiadas opciones que no están del todo categorizadas y vamos a explicarlas a continuación. En la sección “Play” podremos elegir entre dos modos de juego, “Moshpit” y “Ground War”. Moshpit tiene 3 modos de juego propios: “Team Death Match”, “Hardpoint” y “Domination”.

En Team Death Match, nos enfrentaremos a otro equipo en cualquiera de los tres escenarios disponibles: Favela, Skidrow y Estate, que son remasterizaciones de Call of Duty: Modern Warfare II. Muy nostálgico todo. El objetivo es el de llegar a un puntaje específico antes que el otro equipo, al cual llegaremos sumando puntos por matar al otro equipo, no hay muchos secretos.

En Hardpoint, deberemos tomar y defender un punto específico que irá cambiando de locación a medida que avanza la partida. Eso se hace durante una cantidad específica de tiempo. Finalmente, en Domination, tendremos varios puntos diferentes en el mapa que deberemos tomar y defender del otro equipo. Mientras más bases tomadas tengamos, más puntos generaremos y ganará quien tenga más al finalizar el tiempo, o quién llegue primero a un milestone preestablecido de puntos.

El otro modo principal, Ground War, contaba con un solo mapa durante la primera semana de beta y no hemos encontrado participantes con quienes jugar, por lo que no hemos podido siquiera probarlo. Quizás la próxima semana tendremos más suerte.


Podremos customizar nuestro equipo y armas, lo que permite guardar varios sets preestablecidos con nuestras armas y equipos preferidos para diferentes misiones. Esto agiliza mucho la preparación prejuego y nos deja variar seguido de estrategia sin muchas vueltas. También podremos modificar nuestras armas y acceder a nuevas armas y equipo subiendo de nivel y cumpliendo misiones diarias aleatorias.

En cuanto a personalización, podremos elegiremos nuestro avatar. Al comenzar las opciones son pocas, pero a medida que vamos subiendo de nivel, se irán habilitando más opciones para ambos bandos. No hay mucha cantidad ni variedad para elegir, pero con el diferente equipo y las modificaciones estéticas que podemos hacerle a las armas, tendremos bastantes opciones para que nuestro avatar sea particularmente diferente a los otros.

Con respecto a la experiencia de juego durante la beta, no encontramos ningún problema de conextión, además de no encontrar ningún jugador para Ground War. Esto podría haber sido un problema nuestro, así que no creemos que reste a la experiencia.

Al jugar, no encontramos ningún tipo de lag. En general, las partidas se llenaban rápido y, como mucho, habremos tenido que esperar 5 minutos entre partida y partida. Y mucho menos si ya estamos con una party específica de jugadores. Morir y respawnear es cuestión de un instante, lo que hace que las muertes sean mucho menos frustrantes y nos permite vengarnos casi instantáneamente de nuestro verdugo, haciendo que cada partida sea realmente emocionante y adrenalínica.

El movimiento se siente fluido y cada arma se siente diferente, lo que permite elegir el tipo de gameplay que más se adecúe a nuestras preferencias. La variedad de opciones que Call of Duty: Modern Warfare III nos presenta para eliminar a nuestros enemigos y tomar ventaja de la partida es muy variada. Contaremos con granadas de humo y de luz, explosivos de proximidad, bombardeo de zona, caja de municiones, dispositivos para hackear los radares y las comunicaciones del equipo enemigo y para tomar sus bases más rápido y de forma remota, y mucho más. 

Si bien las opciones son muchas y variadas, algunas son innecesariamente complicadas de ejecutar, por lo que, en general, solemos ver (y adoptar) las mismas opciones seguras una y otra vez.


Los mapas, como ya mencionamos, son los que vimos en Modern Warfare II. El único más o menos grande es “Estate” y todos ofrecen puntos ciegos ideales para los que prefieren jugar acostados en el suelo esperando a que una cabeza se asome por su mira. Esto hace que el gameplay sea bastante frustrante, ya que más de una vez moriremos ni bien renacemos, porque algún enemigo encontró el punto ideal para esperar a que alguien aparezca y cabecearlo antes de que sepa que volvió.

Asumimos que, cuando se sumen más mapas, esto se puede llegar a diluir lo suficiente como para no ser un problema. Pero al ser los únicos tres disponibles por el momento, influye mucho en el disfrute total de esta experiencia. Desde Activision, deberán prestarle atención al dilema de jugar de otra forma que no sea con rifle sniper y campeando, porque termina siendo la más efectiva y las otras demasiado arriesgadas, por lo que terminamos enfrentándonos siempre contra gente que juega de la misma manera.
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ESCRITO POR Rodrigo Scarlata

Amante del terror en todos sus medios y aspirante a artista marcial. Ama a Hokuto no Ken casi tanto como a sus gatos.

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